¿Cuáles son algunas formas de debatir más en la vida cotidiana?

Lea los eventos actuales más, reflexione sobre ellos y forme una opinión. El debate no tiene que ser contra tu pareja. Si está de acuerdo con las ideas (lo que es realmente bueno) puede animarse a encontrar mejores argumentos.

El método “por qué” por excelencia: sigue preguntándote a ti mismo y a él, “por qué”. ¿Por qué se siente de cierta manera acerca de un tema determinado? ¿Qué le llevó a esas conclusiones? ¿Hay alguna otra variable al acecho?

Por ejemplo, la cultura de la violación es más publicitada hoy. ¿Por qué creo esto? Porque lo veo más en la tele y en el periódico. ¿Es porque la televisión y los periódicos lo informan más estos días, es la naturaleza “escándalo” de la historia? ¿Los medios de comunicación están haciendo justicia a estas violaciones al tratarlas así? ¿Significa esto que están ocurriendo más violaciones horribles en este siglo en comparación con las anteriores? ¿Cuál es la reacción? ¿Qué significa la reacción? ¿Significa que el feminismo está aumentando de nuevo? ¿Tendrá más impacto hoy?

Hay todo tipo de preguntas que puedes hacerte (y él) para desarrollar una postura de cuerpo completo en un tema. Y hay muchos temas candentes que puedes elegir. En lo social, puedes elegir desde la postura sobre el aborto hasta el republicanismo: ¿es lo mismo que en la era Reagan? Financiera, ¿la crisis económica continúa o el secuestro de los Estados Unidos perjudicará a los más vulnerables? Jeck, incluso la cultura pop: ¿harán una película de Wonder Woman y, si lo hacen, tienen alguna razón para representarla como un icono feminista y qué efecto podría tener eso?

Solo deja que tu curiosidad saque lo mejor de ti 🙂 Y no des por sentado lo que tu novio dice. Cuestiona sus motivos por su postura. Cuestiona sus suposiciones. Les ayudará a ambos a comprender mejor sus propias creencias políticas y morales. 🙂