No hay ciencia. Es magia que requiere química, misterio y una chispa eléctrica. Llamas la atención de alguien, sonríes levemente y apartas la vista unos minutos antes de mirar atrás. Si él / ella está mirando para ver cómo regresa tu mirada, es un comienzo.
Pídale a un amigo que sea un experto que lo lleve como aprendiz, o simplemente siéntese y observe cómo trabaja.