No cuentes los críticos.
Conocerás a muchas personas que te criticarán por cualquier cosa que hagas, tu manera de vestir, tu idioma, tu apariencia, tu educación, tu trabajo, todo. Si empiezas a preocuparte por eso tu vida será miserable.
Solo ignóralos y no dejes de intentarlo. Recuerda que el que comete el error aprende algo nuevo cada vez. Incluso si él falla, él se atreve grandemente.
Le sugiero que lea el siguiente poema de Theodore Roosevelt ..
- Cómo decir tonterías sin decir la palabra tonterías
- ¿Qué puedo hacer cuando él me miente constantemente a la cara?
- Si una chica te molesta diciendo que eres fea y no eres buena y otras cosas solo para molestarte. ¿Eso significa que ella está en ti?
- ¿Vas a hablarme?
- ¿Hay alguna forma sutil de decirle a mi asesor que escuche los problemas de no investigación de los estudiantes de doctorado y otras versiones de las historias?
No es el crítico quien cuenta;
no el hombre que señala cómo tropieza el hombre fuerte,
o donde el hacedor de hechos podría haberlos hecho mejor.
El crédito pertenece al hombre que está realmente en la arena,
cuyo rostro está empañado por el polvo y el sudor y la sangre;
quien se esfuerza valientemente; quien se equivoca,
que se queda corto una y otra vez,
porque no hay esfuerzo sin error y carencia;
pero quien realmente se esfuerza por hacer las obras;
quien conoce grandes entusiasmos,
las grandes devociones;
que se gasta en una causa digna;
que en el mejor de los casos sabe al final el triunfo de los grandes logros,
y quien en el peor de los casos,
si falla
al menos falla al atreverse grandemente,
para que su lugar nunca sea con esas almas frías y tímidas que ni conocen la victoria ni la derrota.
Eso es todo lo que tengo..
¡Gracias!