¿Por qué la gente siempre trata de nombrar las relaciones?

En palabras simples, es porque a la gente no le gustan las confusiones. Cuando uno no le da un nombre a una relación, siempre hay una sensación de confusión. Para ser honesto, las personas siempre saben en el fondo dónde se encuentra su relación y, cuando no la mencionan, probablemente no quieran enfrentar las circunstancias. La mayoría de las veces, la decisión de no nombrar la relación es la mejor opción para mantener esa relación intacta. Por lo tanto, uno no debería preocuparse por lo que las personas están tratando de decir, si las personas involucradas están cómodas, ¡entonces no hay necesidad de nombrar la relación!

Gracias por A2A

Dar un nombre hace que sea fácil para las personas vincular su relación bajo los parámetros que se supone que debe seguir el “nombre”.

Incluso si usted es ajeno (por su propio bien) al tipo de relación que desea mantener,
Otros quieren asegurarse de lo que es para ellos.

¿Quieres nombrar una relación y vivir con la idea que abarca? Bien, eres justo lo que exige la sociedad. ¡Y no hay nada malo en tu forma de pensar!

¿No quieres nombrar una relación sino continuar solo por el bien de que ambos han puesto esfuerzos en ella y debería sostenerla porque pertenece a algo más que un nombre?

Mejor, pero aquí es donde la sociedad frunce el ceño. Ahora, ¡cómo tratas a los demás te define a ti y a tu relación sin nombre!

Los humanos entienden haciendo comparaciones, juicios, evaluaciones de cosas entre sí para diferenciarlos de otros para comprenderlos y reconocerlos mejor. Las diferencias que crean son subjetivas y no existen realmente. Las relaciones y las tradiciones tienen muchas similitudes, por lo que cada relación debe nombrarse según los puntos de vista tradicionales. El hombre no ha sido bueno para recordar cosas, por lo que dio a luz para clasificar y comparar las cosas para comprenderlas mejor. La relación no es más que un acuerdo, pero para encajar en la sociedad, vamos según las reglas de la sociedad. Los roles que proporciona cada individuo se determinan sobre la base de la relación. Viene con algunos derechos y deberes hacia uno mismo y otros como roles limitados. Nosotros, como seres humanos, sentimos la necesidad de ser reconocidos y reconocidos por otros miembros de la sociedad, por lo que es un nombre distintivo para nuestra identidad existente en la sociedad.

Pregunta 1: Entonces, ¿quién más hay en tu familia?

Respuesta: Ahí está él, él es mi eso. Ahí está ella, ella es suya y mi esta. Luego está él, ella y su ella.

Extienda esto a todas las conversaciones posibles que involucren todas las relaciones posibles. Espero que te des cuenta de lo difícil que resulta conversar.