La actitud defensiva es una señal de que el ego se ha movido hacia adentro. En lugar de responder con actitud defensiva, primero trata de averiguar por qué estás a la defensiva. Quizás sientas que puede haber algo de verdad en lo que dice tu compañero. Cuando te sientas incómodo por algo que alguien te está diciendo, ¡tómalo como una señal! ¡Es hora de crecer! Pregúntese: “¿Por qué me siento a la defensiva? ¿Qué es este sentimiento tratando de decirme?” En lugar de responder en esa defensa, especialmente si no está listo para responder, solo dígale a su compañero que necesita algo de tiempo para pensar y calmarse. Identifique sus razones para la defensa y luego explique cómo se siente con su pareja. Si son de apoyo y comprensión, ¡entonces increíble!
Si no, si se quejan y te critican todo el tiempo sin ninguna razón, entonces esa no es una relación sana para el crecimiento mutuo y puede que sea el momento de considerar una estrategia de salida.