En primer lugar, él no es responsable de su fracaso en el examen. Usted está. Lo que sea que hizo, le dejas que te lo haga a ti. El primer paso es culpar a nadie más que a ti mismo, porque eso te permite tener la sensación de control total de tu vida, que eventualmente puedes obtener si sigues esto.
En segundo lugar, es tu elección si quieres volver con él o conocerlo. Eres tu propio juez. No lo hagas por su felicidad, o no evites hacerlo porque lo culpas. Toma una decisión basada en lo que crees que es correcto y en lo que te hace feliz. Y sea cual sea la decisión que tomes, vive con ella sin arrepentimientos. Aprende las lecciones, y sigue viviendo tu vida.