Una relación a larga distancia puede ser frustrante. Estar alejado el uno del otro parece ser lo peor posible, pero cuando finalmente te reúnes con tu pareja, todo ese tiempo aparte y la espera parece merecer la pena. Pero ese es el principal problema con un “LDR” … siempre estás viviendo en extremos. O estás emocionado cuando estás con ellos, o desdichado cuando estás lejos.
- Te pierdes lo que es estar físicamente cerca uno del otro
- Te pierdes lo que es estar físicamente cerca uno del otro
- ¿Crees que un LDR no es tan caro como las citas regulares? ¡Piensa otra vez! Lo que se ahorra en fechas caras, se gasta en entradas caras. Dependiendo de dónde esté su novio, usted tiene un presupuesto para viajar para ir a verlo o él tendrá que verlo a usted. De cualquier manera, es un gasto y una visita puede resultar más costosa que las cenas de lujo semanales.