Mi mejor conjetura sería que hay algo en la forma en que huele que atrae a Rudi. Recuerde que el sentido del olfato de un perro es mucho más agudo que el de un humano. En cierto modo, viven en un mundo de olores como nosotros vivimos en un mundo visual, y hay evidencia que sugiere que sus preferencias están influenciadas por él.
Así que creo que, de alguna manera que es imperceptible para usted, Rudi ha decidido que huele como un ganador. 🙂