Una expresión de feminidad podría ser batir las pestañas, vestirse con encaje y tacones altos, ser cuidadoso, no ser agresivo.
Una expresión de masculinidad podría ser ser dominante, hacer solo la preparación necesaria para parecer limpio y ordenado, ser protector.
El supuesto es que, dado que están tan extendidos, son naturales para las mujeres y los hombres. Es así que así es como la química impulsa a las mujeres y los hombres a actuar. Se supone que si los niños pudieran criarse sin ideas culturales sobre lo femenino y lo masculino, los niños podrían hacer ese tipo de cosas de manera natural.
Pero esas son expresiones culturales. Pero no podemos saber cómo serían los niños criados sin ideas preconcebidas de cómo se supone que deben actuar los géneros. Los niños adoptan la forma en que “deberían” actuar de miles de fuentes. Hay micro exposiciones que se refuerzan una y otra y otra vez.
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Sé que hay padres decididos a no imponer ideas culturales sobre la feminidad a sus hijas y tienen chicas que adoran el rosa, los adornos y las princesas. Hay padres decididos a criar a sus hijos en hogares pacíficos cuyos hijos no pueden tener pistolas de juguete que luego convierten cualquier cosa en un arma. (Y algunas chicas son agresivas y a algunos niños les gusta el rosa).
Los padres decididos a criar a sus hijos sin prejuicios de género encuentran que los niños en general son más agresivos y las niñas en general están más dispuestas a participar. Pero eso no dice nada acerca de cómo será un niño o niña en particular. Y luego la cultura se deshace de todo. Padres, otros niños, imágenes en libros, TV, películas influyen en ellos. Las niñas recogen las ideas que la sociedad las admira por su capacidad de entrar en segundo plano y los niños por ser más agresivos y hacerse cargo (entre otras ideas).