Hágase la pregunta aparentemente simple: ¿Me está sirviendo bien mi enojo? En otras palabras, ¿obtendré lo que espero obtener de mantener la ira? Entonces pregúntate esto: ¿Dejar de lado la ira me serviría mejor? Si es así, ¿puedo reconocer que todos están tratando de pasar la vida lo mejor que pueden, dadas las circunstancias en las que se encuentran? Si puedo, entonces puedo encontrar compasión por ellos. Reconocer que tu novia simplemente está tratando de pasar la vida lo mejor que pueda, igual que tú, puede permitirte sentir compasión por ella. La compasión es el antídoto para la ira.
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