Resulta que el cuello es uno de esos lugares a los que una chica es muy sensible. Él está esperando que al besar allí pueda hacer que olvide todo lo demás y evitar que se escape de los intentos.
Y en la mayoría de los casos, si continúa esto funcionará. La niña tiende a enfocarse en el calor del beso en su cuello y deja de resistirse.