Me gusta la palabra francesa para fluidez – la fluidita – que incluye la palabra “fluido”. Así que si eres fluido tu conversación fluye como un líquido. Cuando llegas a una palabra que no sabes, fluyes alrededor de ella como el agua alrededor de una roca. Si se detiene, hace una pausa y busca la palabra perfecta, carece de fluidez.
Así que una conversación fluida es el sello de la fluidez.