Normalmente son tus padres. Aprendes sobre el amor y cómo amar experimentando su comportamiento hacia ti. Aprendes al verlos relacionarse entre sí y con tus hermanos.
Si tus padres no te enseñan a amar, es posible aprender de las personas con las que tienes relaciones. A veces los maestros pueden enseñarte amor, así como cualquier otra cosa que te estén enseñando. Los maestros no son amantes, pero pueden mostrarte cómo cuidar y amar a los demás de una manera no sexual.