Sí, en el momento en que categorizamos algunas cosas o personas según un criterio, también tendemos a estereotipar las otras cualidades.
Al igual que las personas que viven en una ubicación geográfica particular, son estereotipados todos sus hábitos, en función de su ubicación. Lo mismo ocurre con todo tipo de categorización, como religión, credo, color de piel, tipo de cuerpo, idioma hablado, sexo, preferencias sexuales. Los colocamos en categorías y generalizamos cada una de las cualidades en función de sus categorías.
No siempre hace justicia, ya que subconscientemente cambia nuestro comportamiento hacia ellos.