¡Ooh Dios mio!
¡Tipo! ¡No entres en la habitación de alguien para tomar una siesta! Bien, después del sexo puedes tomar una siesta.
Tú conoces a ‘la Dama’ más que a cualquiera de nosotros, pero querida amiga, no importa lo que diga, te diré que salgas de esta relación. Romper con ella. De lo contrario te harás daño. ¿Que hay de ella? Obtendrá más, como si tuviera a este hombre que la conduce aquí y allá, y ella maneja su pickachu.
Me estaba riendo de tu historia pero estoy triste por ti. Que Dios te dé la fuerza para no matar a alguien.