No, no me escapo de mis emociones, porque he descubierto que no hay lugar para escapar de ellos. No duele retirarte de lo que está causando emociones no deseadas, pero como dicen … “No importa a dónde vayas, ahí estás”. Con toda seriedad, he aprendido a no aferrarme a cosas que me molesta. Los dejé ir a través de mí. Después de haber pasado por estos trastornos emocionales suficientes veces, empiezas a comprender y “Eso también pasará”. Entonces, acorta el proceso, y deja que se deslice. ¡Las emociones son de creación propia! Lo que te molesta, probablemente no moleste a nadie más. Al menos no de la misma manera, o intensidad. Ego, encontrarás que es nuestro mayor enemigo. Cuanto más grande es el Ego, más duele. No te preocupes, ni te impacientes, la sabiduría viene con las experiencias de la vida. (Con suerte) Cuando era joven, crecí con Expectativas, que me enseñaron mis amigos y mi familia. …. “¡Hay UNA chica ahí afuera que está esperando, Sólo para ti”! Todos tienen una pareja perfecta, esperando en algún lugar, y lo sabrás cuando la encuentres. De hecho, me enamoré de esa mierda, yo y todos los demás chicos y chicas que vivían en esos días. Noté que todos los padres de mis amigos que todavía estaban juntos, parecían Miserables. Ciertamente no eran Ward y June Cleaver (probablemente antes de tu tiempo). Vaya con lo que se le presente, juegue con los golpes y disfrute de los buenos momentos. Aprende de las situaciones que te molestan, ¡pero no te detengas ahí! Averigüe por qué ciertas situaciones le molestan, más que otras. “CONOZCA A TÚ MISMO”, porque eres el único sobre el que tienes algún control. No pierda tiempo tratando de cambiar, o averigüe acerca de todos los demás (aunque, no sea indiferente) Siempre preste atención a los sentimientos de los demás. Pero presta atención principalmente a ti mismo. La introspección, es el camino a la satisfacción. Da todo lo que puedas, pero nunca esperes nada a cambio. Esa no es la verdadera naturaleza de dar. Eso es un acuerdo, un trato. Estarás bien. Tú eres el amo de tus emociones.
MGPearson