¿Era común que las mujeres se fueran con el dinero y el auto de un músico?

Es una manera más visual e impactante de decir: “Ella tomó mi corazón y se fue visiblemente en mi vida”.

Además, transmite la emoción de que me siento impotente y sin conductor en esta situación, ya que acabo de experimentar la pérdida de mi niña. ¿Qué hago, sin coche y sin dinero? (O, mejor dicho, ninguna chica que me guíe en la vida).

En la ruptura, ella puede haber conseguido REALMENTE el gato mascota, la mesa del comedor y la mayoría de los DVD de la colección, pero no es interesante escucharlos en las letras.

Recuerda, tú tampoco escuchas en las canciones lo que él guardó (de ella). “Tomé la casa, y su suéter favorito”.

o…

“El gato se fue y se fue, pero el perro se quedó. ¡Buen viejo amigo!”

Se llama licencia poética. Supongamos que estás viviendo con tu pareja, y entonces un día las cosas se ponen feas y tu pareja se muda, llevándose sus cosas con ella. Entre las cosas que probablemente tomará están los activos en disputa que ambos comparten, como parte del dinero, la mascota de la familia (“ella se llevó a mi perro” es un elemento básico de la música country), y así sucesivamente. Te haría sentir como si te hubieran quedado sin nada.

Una idea divertida de esta idea es la canción “¿Dónde te fuiste con mi cepillo de dientes?”, De The Reverend Horton Heat. Muy recomendable.

Es una expresión básica de Blues. Greg Allman se lamenta en “Whipping Post” (Ella tomó todo mi dinero y destruyó mi nuevo auto). Taj Mahal gime al respecto en “Ella atrapó a la Katy” (y me dejó una mula para montar). Lo bueno de los Blues es que estas expresiones nunca parecen envejecer.