¿Por qué las personas se esfuerzan tanto para que me importe lo que piensan?

¿Has escuchado el viejo alboroto ‘La indiferencia es lo opuesto al amor?’

¿O qué tal “no es bueno que el hombre esté solo?”

Las personas nacen con la expectativa de que otras personas sean razonables y consideradas. Lo único que queda de pie en el camino de la mentalidad similar, entonces, es compartir pensamientos entre sí.

Vivimos en una época de desilusión. Sin embargo, aun cuando la apatía se convierte en la norma, a las personas no les gusta cuando la encuentran.