¿Por qué me río cuando me meto en problemas?

Depende principalmente de la forma en que uno percibe los problemas. Aceptar el hecho de que los problemas son parte integral de la vida y que son inevitables, permite que uno no se perturbe excesivamente.

De hecho, hay un ciclo regular de fases buenas y malas. Durante las fases desfavorables o los períodos problemáticos, uno puede permanecer feliz sabiendo que la siguiente fase debida, en cualquier caso, será la “buena”.