Generalmente se acepta en los campos psicológico y médico, que compartir emociones negativas y “liberar” los pensamientos y sentimientos de uno suele ser terapéutico.
Algunas personas hablan de sus problemas a un barman, algunos a un amigo o cónyuge, otros a un profesional. Otros escriben sobre lo que les molesta, ya sea en libros, blogs o en un diario. Muchos músicos y compositores ponen sus problemas en las letras.