Soy feminista y es bastante simple en lo que a mí respecta. Una persona pide a la otra que salga; El invitado acepta o se niega. Si él (o ella) acepta, ellos salen. O el invitador paga o se vuelven holandeses.
Si, en algún momento, uno de los dos sospechosos tiene química entre ellos, él (o ella) se mueve, por ejemplo, sosteniendo la mano de la otra persona o inclinándose para besarla. Si la otra persona responde, puede subir al siguiente nivel, siempre vigilándose para asegurarse de que ambos están cómodos con la manera en que se dirigen las cosas. El “registro” puede ser literal, con palabras o mediante el lenguaje corporal.